sábado, 8 de octubre de 2011

El principio del principio.



Pincha aquí para ver esta foto.
¿Sabes donde he estado hoy? Pues en el sitio donde nos dimos nuestro primer beso. Recuerdo que todo vino por la tontería de que me quitaste mi guapísimo reloj rosa y te seguí hasta allí para que me lo dieras. Recuerdo también que no podía casi ni respirar de lo cerca que te tenia al fin y que las manos me temblaban no sé por qué. Entonces me miraste con esos ojos tan brillantes y me sonreíste por primera vez, en ese momento supe que desde ese día necesitaba que me sonrieras todos los días para vivir, y sin más sucedió, nunca pensé que un reloj podía hacer tanto. Luego te tuviste que ir deprisa porque perdías el tren y yo no pude dejar de sonreír el resto de la noche. Sinceramente no sé cómo terminar este texto, sin contándoles que ahora mismo estamos enfadados y que discutimos cada poco o diciéndoles que con él he pasado los mejores momentos de mi vida y que le necesito en mi vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario